Así como muchos temas actuales están siendo ampliamente debatidos entre los cristianos, las citas online no escapan a la discusión. Por un lado, los que no la apoyan, creen que buscar amor en línea revela una falta de fe en la provisión de un cónyuge departe de Dios; afirman que las listas interminables de perfiles en línea crean una mentalidad consumista superficial que socava el carácter sacrificial de amor centrado en Cristo.
Por otro lado, los que están a favor, creen que la cita en línea es simplemente una herramienta que Dios puede usar para llevar a dos personas a conocerse y dicen que los usuarios no ponen su fe en el sitio de citas, sino en el Señor.
Pero qué puede haber de malo en que dos personas se conozcan a través del internet?
Los argumentos de ambas partes tienen méritos. Como muchas otras cosas, las citas en línea no son intrínsecamente malas o buenas. A veces las cosas que hacemos son menos importantes que el corazón con que las hacemos. La Biblia no ofrece principios específicos sobre esto, pero si nos ofrece principios generales en como debemos llevar nuestra vida. Podemos tomar así estas grandes ideas y aplicarlas a nuestra vida cotidiana y las decisiones que tomamos. Pero como en todo, este proceso requiere sabiduría, discernimiento y orientación.
Aquí te ofrecemos algunos puntos a tener en cuenta si decides usar la internet para conocer a alguien.
1. Trata de conocer a la persona tan pronto como sea posible: Esto te da la posibilidad de conocer a la otra persona en un aspecto mas real. Es importante ver por sí mismo cómo esta persona trata a los demás, cómo lleva su vida cotidiana. Planifica una reunión en persona antes de desarrollar sentimientos "online" así podrás saber si se trata de una relación que puede continuar o no.
2. Tener sentido común: El conocer a alguien vía web no significa que esta persona sea quien dice ser. Al programar la primera reunión en persona, hazlo en un lugar público. Infórmale a tu familia o amistades cristianas mas cercanas lo que estas haciendo. Sería recomendable llevar a tu primer encuentro a una persona muy cercana a ti, que te pueda dar su opinión.
3. Introducir rápidamente a esta persona a tu círculo y que conozca tu familia. Asegúrate de reunirte con tu círculo íntimo de amigos. Si esta persona acepta, denota un interés serio y que no hay ánimos de esconder nada.
4. Esta bien si la reunión inicial es un poco incomoda. Nada es perfecto y un primer encuentro con una persona que no conoces, tampoco lo es.
5. Confiar en Dios antes que nada. Al igual que las parejas que se conocen de manera convencional, orar, confiar y obedecer a Dios, como en los demás aspectos de tu vida, será la gran diferencia.
Tomado de The Christian Post y Focus on the Family. Original en ingles, traducido libremente por Global, Revista Digital.
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